¿Es posible una economía solidaria?
Movidos por esta inquietud supimos que en muchas partes del mundo existen las monedas complementarias. Estas monedas son parecidas a las de los clubes del trueque que hubo en nuestro país cuando la crisis del 2001, pero con algunas diferencias.
Nuestra moneda solidaria se llama Ayni. Está respaldada por pesos a razón de 1=1. Se accede a nuestra Red intercambiando pesos por Aynis. Así, los participantes intercambian sus productos o servicios con esta moneda. El beneficio radica en que hay un monto de dinero que siempre circula entre un grupo de gente. Acceder a nuestra Red otorga un espacio publicitario en nuestra revista de la Red Ayni y en nuestra página de face (Ayni: Asociación para una Economía Solidaria)
El Ayni está sujeto a una tasa de oxidación. Se debe pegar, cada 3 meses, una estampita al dorso de cada billete la cual tiene un pequeño costo, de lo contrario el Ayni pierde su valor. Este recurso genera que busquemos gastar el Ayni, y no guardarlo. Los fondos recaudados por las estampitas van al gasto de la revista.
El Ayni es solidario porque parte del principio de que las monedas son un bien común de una comunidad, y beneficia a esta cuando dicha moneda circula.
Las monedas de este tipo están siendo cada vez más consideradas en países como Alemania, EEUU, Francia, España, Ecuador y Brasil. No son un recurso contra las crisis, si no contra la problemática mundial de que nuestras monedas nacionales están emitida como monedas de crédito, de modo que privilegian el interés y la inversión financiera, y no la circulación. Hoy en día la emisión de monedas nacionales alcanza niveles grandiosos. Sin embargo la desigualdad mundial es enorme. Las monedas nacionales están polarizadas hacia las finanzas y no llegan a la economía real.
El Ayni es una moneda complementaria a la moneda nacional. Colabora con ella dado que le ofrece anclarse en un lugar. Este tipo de proyectos están legitimados y regulados en los países mencionados. Amplios sectores de su esfera políticos y económicos se están dando cuenta de los beneficios que traen para el comercio y de empresariado.
Desde que implementamos el Ayni las ventas han crecido. Tenemos en nuestra Red una amplia oferta de bienes y servicios. La escuela lo recibe como parte de pago de la cuota, y los maestros lo reciben como parte de pago en su sueldo.
Actualmente tenemos una idea confusa del dinero, asociándolo con el egoísmo, la avaricia o el lucro. Pero el dinero no es eso; nosotros hemos hecho eso del dinero. Cuando una comunidad de personas, fraternalmente, deciden actuar conscientemente sobre cómo cubrirse mutuamente sus necesidades, el dinero aparece como un recurso muy importante.
Hemos creado una sociedad en donde en lugar de usar el dinero como medio para desarrollar nuestra capacidades, utilizamos nuestras capacidades para conseguir más dinero. Naturalizamos la idea de que cuando uno se forma para aquello que nuestra vocación nos llama a hacer, ¡Lo hace sólo para ganar dinero! Uno se forma para ser libre, y para ello es indispensable el dinero. Con el dinero las necesidades y las capacidades circulan por la sociedad, pero el fin más elevado son las personas y el bien común.
Actualmente el medio se transformó en fin, y el fin en medio.
El dinero, al igual que el Arte o la Ciencia, es una de las más maravillosas creaciones humanas. No podemos ser esclavos de él, si no que él debe estar a nuestro servicio.
Contacto: ayniasociació[email protected]